Diligencias instruidas a petición de Martín Ibáñez de Ibarrondo, vecino de Tabira de Durango, en nombre y como curador y legítimo administrador de Estíbaliz y Gracia de Ibarrondo, hijas y herederas del bachiller Lope Ibáñez de Ibarrondo, para que se le autorice la venta de la casa-torre de Emparanza con su bodega y sus lagares, sita en la plaza de Santa María la Mayor de Durango, de 50 libros y de una tierra manzanal de 60 pies de manzanos, sita en Las Partidas de Tabiraeta, que dejó a su fallecimiento el citado bachiller, para con su importe poder pagar los 300 ducados oro de dote que dejó debiendo a su mujer Ana Rodríguez, y venta de dichos bienes a favor del escribano Pedro Pérez de Orozqueta, vecino de la citada villa, por los 300 ducados de oro citados.
Contiene:

• Carta de pago de los 300 ducados de oro de la venta otorgada por Martín Ibáñez de Ibarrondo, como curador de las menores, a favor de Pedro Pérez de Orozqueta, ante el escribano Pedro Ibáñez de Artezubiaga, fechada en Tabira de Durango el 21 de enero de 1524.
• Toma de posesión por Pedro Pérez de Orozqueta de los bienes que había comprado, en Tabira de Durango el 21 de enero de 1524.

Diligencias instruidas a petición de Andrés de la Hera Tosantos, presbítero de la iglesia de Labastida, para que Tomás de Ortigosa [Suso] y Pedro de la Puente, vecinos de Labastida, se ratifiquen en una declaración, realizada el 28 de febrero de 1752, por la cual les autorizaba a sacar agua de una cueva, perteneciente al mayorazgo de Juan de Ortigosa, a un cerrado de Andrés, lindante con ella en el término de Puellas, sin que adquirieran derechos por ello.

Diligencias instruidas a instancia de Andrés de la Hera Tosantos, presbítero beneficiado en la iglesia parroquial de Labastida, para que los herederos de Tomás Ruiz de Loizaga, respeten el convenio que habían firmado por el disfrute de una bodega y paguen los réditos devengados.
Contiene: Convenio realizado entre Tomás Ruiz de Loizaga y Andrés de la Hera Tosantos, beneficiados de la iglesia parroquial de Labastida, para el disfrute de una bodega, propiedad del segundo, y aceptando la declaración realizada por el maestro cantero Ignacio de Elejalde. Labastida, 5 de diciembre de 1749 ante el escribano Francisco de Landa Ocio.